"La verdad levanta tormentas contra sí que desparraman sus semillas a los cuatro vientos" (R. Tagore)
La portavoz del grupo municipal socialista en el Ayuntamiento de Alicante y número 3 de la candidatura socialista para la nueva legislatura, Carmen Sánchez Brufal, anuncio ayer su decisión de renunciar al acta de concejal. En la rueda de prensa celebrada para comunicar su decisión argumento que se ha abierto "una etapa nueva" y que el "futuro no es ni Ángel Franco, ni Fernández Valenzuela -dirigentes históricos del socialismo en la ciudad de Alicante- ni de los navajeos", sino que en su opinión "hay que el dar paso". Seria muy fácil y recurrente hacer leña del árbol caído, criticando a esta señora que hace una semana si que se veía capaz de ser parte de un equipo de gobierno que pretendía manejar el rumbo de la ciudad durante cuatro años. Pero no lo haré, tan solo puedo decir que está decisión, de la que comparto la parte final, no todos los motivos que argumenta, merece un APLAUSO, demuestra valentía, honradez, honor, y el germen de lo que debia ser (y no es) la clase política. Ese es el camino para que el PSOE cambie hacia el modelo de partido que reclama la nueva sociedad del siglo XXI y no la del siglo XIX que es en la que ellos viven. Me ha gustado especialmente la parte de su exposición donde ha señalado que en este momento es necesario acabar con "la actitud cainita, de no asumir nunca nada" de la que los socialistas, desde su punto de vista, han hecho gala en los últimos años.
Siempre dije, y tengo testigos que lo pueden avalar que está señora hace dos legislaturas podría haber tenido opciones seria de acceder a la Alcaldía, si los "muertos vivientes" que ahora han provocado su salida, hubieran aprobado la renovación que merecía ese partido en el Congreso celebrado anteriormente a las elecciones que gano Alperi. La ansias de poder, zancandillas, navejos, los agazapados en la hojarasca en forma de militancia, la ceguera, la ambición, las luchas fratricidas, las familias, etc. han sido y son las responsables de la perdida de votos, militancia, simpatizantes, afecciones y hasta de la identidad de esa partido. Espero para bien de la democracia no solo en está ciudad, sino en este país, que cuanto antes tomen nota y escuchen los mensajes que les da la ciudadania y en este caso, sus propios responsables políticos, en este caso los más valientes y si cabe honestos. Es su mano está. Ya vorem!
La portavoz del grupo municipal socialista en el Ayuntamiento de Alicante y número 3 de la candidatura socialista para la nueva legislatura, Carmen Sánchez Brufal, anuncio ayer su decisión de renunciar al acta de concejal. En la rueda de prensa celebrada para comunicar su decisión argumento que se ha abierto "una etapa nueva" y que el "futuro no es ni Ángel Franco, ni Fernández Valenzuela -dirigentes históricos del socialismo en la ciudad de Alicante- ni de los navajeos", sino que en su opinión "hay que el dar paso". Seria muy fácil y recurrente hacer leña del árbol caído, criticando a esta señora que hace una semana si que se veía capaz de ser parte de un equipo de gobierno que pretendía manejar el rumbo de la ciudad durante cuatro años. Pero no lo haré, tan solo puedo decir que está decisión, de la que comparto la parte final, no todos los motivos que argumenta, merece un APLAUSO, demuestra valentía, honradez, honor, y el germen de lo que debia ser (y no es) la clase política. Ese es el camino para que el PSOE cambie hacia el modelo de partido que reclama la nueva sociedad del siglo XXI y no la del siglo XIX que es en la que ellos viven. Me ha gustado especialmente la parte de su exposición donde ha señalado que en este momento es necesario acabar con "la actitud cainita, de no asumir nunca nada" de la que los socialistas, desde su punto de vista, han hecho gala en los últimos años.
Siempre dije, y tengo testigos que lo pueden avalar que está señora hace dos legislaturas podría haber tenido opciones seria de acceder a la Alcaldía, si los "muertos vivientes" que ahora han provocado su salida, hubieran aprobado la renovación que merecía ese partido en el Congreso celebrado anteriormente a las elecciones que gano Alperi. La ansias de poder, zancandillas, navejos, los agazapados en la hojarasca en forma de militancia, la ceguera, la ambición, las luchas fratricidas, las familias, etc. han sido y son las responsables de la perdida de votos, militancia, simpatizantes, afecciones y hasta de la identidad de esa partido. Espero para bien de la democracia no solo en está ciudad, sino en este país, que cuanto antes tomen nota y escuchen los mensajes que les da la ciudadania y en este caso, sus propios responsables políticos, en este caso los más valientes y si cabe honestos. Es su mano está. Ya vorem!
No lo habría descrito yo mejor, argy. Pudo ser cuando prometía, no fue porque la compañia no empujaba en la misma dirección, después se dedicó a lo que todos, a hacer de Angel Luna en Alicante con el resultado conocido. Ahora, por fin, hace lo que no hace ningún político, NO AFERRARSE AL CARGO, y eso es de aplaudir y mucho.
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