domingo, 24 de abril de 2011

ENCUESTAS Y DEMOCRACIA REAL






"No todos los hombres pueden ser grandes, pero pueden ser buenos" (Confucio)

Hoy me apetece tocar el tema de las encuestas electorales, un tema siempre recurrente así como criticado (a conveniencia claro del que lo hace) y que en este momento toma de nuevo relevancia cuando de una parte tenemos a quienes les son del todo favorables y quienes como es lógico le vaticinan un oscuro futuro (para variar). Unos se hacen los "remolones" ocultando su satisfacción y otros "echan balones fuera" diciendo que solo marcan tendencias, que todo cambia, que no del todo son válidas etc. Pero ¿porque en el fondo interesan estás a quienes las consumen (en este caso las electorales)y a quienes las encargan?.
Veamos. Todos sabemos que las personas estamos abiertas a la información y podemos aprender (unos más que otros claro) si somos sometidas a las mismas condiciones que fuimos sometidas anteriormente, pudiendo actuar de manera diferente. La libertad da la opción de producir nuevas posibilidades no solo elegir entre lo que nos ofrecen o dan a escoger. Por ejemplo, como he dicho en alguna ocasión; en una democracia formal la libertad se restringe a elegir entre uno de los candidatos o listas ofrecidas no haciendo más que votar. En una democracia real, elegiríamos las opciones dadas y participariamos en la producción de alternativas que el otro sistema niega. Por ello las encuestas simulan una realidad que no es tal. Estás, como las elecciones, contribuyen a que seamos de algún modo menos libres y nos creamos más libres. Las primeras son como una metáfora de la segunda al elegir entre un conjunto cerrado de respuestas, candidatos o listas. A la vez y en otra linea, es diferente lo que se hace y lo que se dice que se haría, hay una diferencia entre decir hoy y decir mañana,,,,, Conviene indicar que la información que proporcionan las encuestas no se distribuyen entre todos por igual, la mayoría no se publican y se quedan en el cajón del que paga para ser utilizada convenientemente cuando convenga (o no), y la información que nos dan la aceptamos como algo ya asumido sin haber ocurrido aún. De tal modo que van produciendo el voto llamado útil o formar parte del grupo de ganadores donde se imponen las opciones mayoritarias y se disipa el poder de influencia de las minorías. No se trata por tanto de ganar para realizar un programa de gobierno, es que el programa de gobierno está calculado para ganar, lo importante es eso mismo, ganar, ganar y ganar. De tal suerte que el político se acomoda a lo que marcan las encuestas, así de claro. Por todo ello el "tándem" de encuestas/elecciones es muy necesaria y válida en este tipo de democracia formal existente en nuestro país, y la solución para su democratización supondría distribuir entre todos las informaciones que producen y por otro lado que desarrollásemos una competencia critica para integrar esa información. Una vez más, ¿para cuando una democracia real?. Pues eso, Ya vorem!

P.D. Este es un articulo que escribí (más o menos igual) hace tiempo refiriendome a uno que se escribío "años a" en un diario de tirada nacional.

2 comentarios:

  1. Va a tardar, argy, pero llegará, yo estoy seguro de ello aunque no se si alcanzaré a verla.

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  2. Yo tambien lo estoy,,,,,,,,,,,gracias.

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