"Así como no existen personas pequeñas ni vidas sin importancia, tampoco existe trabajo insignificante". (Elena Bonner)
Mucho hemos hablado en esta tribuna sobre el tema de IKEA y su instalación en la ciudad de Alicante, y por lo visto mucho tendremos que seguir hablando dado que se le sigue dando vueltas a la comida en la boca sin llegar a digerirla. Ahora los miembros de la Federación Alicantina de Comercio y del Colectivo de Comerciantes de Alicante continúan con una serie de reuniones con los distintos grupos municipales de la oposición del Ayuntamiento con el fin de recabar apoyos contra la construcción del previsto macrocentro comercial ubicado en Rabasa. Un macrocentro que de construirse (no olvidemos que es una de las condiciones de la multinacional sueca) superaría con creces a todos los centros comerciales existentes si a metros cuadrados nos referimos, cuestión que no me cabe duda, es normal que incomode al comercio tradicional de la ciudad, que tampoco están ya para muchos trotes como podemos imaginar. Yo solo me quedo con lo que en su dia se dijo que dejaria la instalción del gigante sueco, esto es, el Ayuntamiento recibirá una inyección inicial de 90 millones de euros por la tramitación administrativa (entre el impuesto de obras y la tasa por la licencia), así como otros 4,5 millones al año en concepto del cobro de impuestos como el IBI, IAE y otras tasas. Nada más por eso, el Consistorio, dada su situación, debiera poner toda la carne en el asador no vaya a ser que se les seque. Bueno es suficiente por hoy. Ja vorem!
Estoy fuera del circuíto ya hace algunos años, pero estoy contigo, me resulta inexplicable que ese proyecto no se haya puesto en marcha, ya, Antonio.
ResponderEliminarSiguen con el lio, los pequeños comerciantes en contra de la implantación de este macrocentro y el resto deseando que venga por todo lo bueno que traerá consigo, a pesar de comprender el pesar de los primeros, repito.
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