"Así, como somos, nos hacemos recalcitrantes ante un "tú debes". Nuestra moral debe decir "yo quiero". (Nietzsche)
Llego el día, La huelga general está servida, algo más de un año tras de la anterior. Esto debiera hacernos pensar a todos, quizás un poco más de lo que solemos hacerlo habitualmente. Desde este mismos momento comienza la danza y la batalla de juicios de valor, por parte de unos y otros, de tertulianos, escribientes, y demás razas, siempre tan cómoda y recurrente, ¿verdad?. Los sindicatos tan condescendientes y bien correspondidos por el anterior gobierno, le organizan una huelga general a un gobierno que lleva "diez" minutos en el puesto y que aplica lo que a buen seguro hubiera aplicado el anterior de haber ganado las elecciones, dada la tutela latente y manifiesta de la UE. Lamento mi parte de culpa, pero asi lo siento. Dicho lo cual, convendré en aclarar que el que suscribe (como sabrá aquel que por aquí pase) hacia critica diaria de lo que creía conveniente al Gobierno ZP, como lo hago a diario de las cuestiones que me parecen oportunas al de Mariano Rajoy. Aclarada la cuestión por si se cuela algún menfotista, decir, que la razón parece evidente, uno no puede estar de acuerdo con que se haga responsable del desastre a quienes nada tienen que ver con ello, que no es otro que la ciudadania. Tanto los que están como los que hubierán estado, nos habrían hecho pasar por lo mismo que ahora vivimos, repito. Da el mismo resultado que te den un puñetazo con un puño, que con otro. Por consiguiente, no estando de acuerdo en absoluto con lo que está haciendo el gobierno actual, ni con sus manipulaciones en forma de malabarismos semanticos, tampoco lo estoy con la oposición, ni sindicatos, que andan metidos en una defensa que está más cerca del mantenimiento del establishment interno que de la representación real de los trabajadores (que por cierto convienen recordar que es de un 5%). Uno que es asi de raro. Podría citar casos de sindicalismo del dia a dia, hasta donde yo se, o conozco, pero lo dejare para otra ocasión, evitando con ello meter el dedo en llaga más de la cuenta. Tan solo recordaré que en mis 22 años de servicio conozco a individu@s liberad@s que no los he visto nunca en su puesto de trabajo. No digo más. No es que no crea en los sindicatos, más bien considero, que los cambios les deben afectar a ellos al igual que les afectan a los ciudadanos de a pie, habituándose a los tempos que a todos nos urgen a aplicar. Por consiguiente, contra este golpe de estado financiero como catalogo la situación actual alguien, no podemos estar de acuerdo, pero opino que las respuestas a estás políticas neoliberales deber seguir una senda en principio razonable y responsable, ya que tiempo habrá de radicalizar las mismas, cosa que lamento tener que admitir. Por todo ello, a diferencia de estos, prefiero ser combativo a diario, que hacerlo solo en huelgas generales. Mi trabajo es lo único que tengo, y siendo esto lo que se reclama para todos, un trabajo, no entiendo como se puede protestar sin ir al mismo, cuando estamos en una situación que dice, de ser un éxito la huelga, haría que se perderían casi 1.000 millones de euros en un país que está en los estertores de la muerte. Por cierto, el Diario francés "Le Monde", siempre tan cortes y atento con España, dice en su portada que España, se ha convertido en el gran problema de Europa. En lugar de huelga general, por que no movilizaciones diarias y constantes delante de cada centro oficial, singularmente por los liberados sindicales que tiempo tienen para ello, así como la organizacion de cualquier otro tipo de actos reivindicativos en diferentes puntos de la ciudad y centros de trabajo publico o privados, etc. etc.. ¿Tendrá razón mi amigo que desde Málaga y a través de su blog (http://fathergorgonzola.com) se lamenta hoy diciendo si tendremos lo que nos merecemos?, en este caso al referirse, de nuevo, a los juicios de valor y malditos estereotipos de tanto uso común en este país de linchadores que llamamos España. Para acabar me quedo con unas palabras referidas de igual modo en el mencionado blog de mi e-amigo Alvaro, y que cita un tal J. Rebuscá, el cual después de una honda reflexión grita a los cuatro vientos: "«Comentaristas, tertulianos, analistas sociales, críticos, editorialistas y parásitos de las ondas y la pluma, váyanse a tomar por culo». ¿Será verdad que la pluma es la lengua de la mente?,,,,,,Ja vorem.,
Llego el día, La huelga general está servida, algo más de un año tras de la anterior. Esto debiera hacernos pensar a todos, quizás un poco más de lo que solemos hacerlo habitualmente. Desde este mismos momento comienza la danza y la batalla de juicios de valor, por parte de unos y otros, de tertulianos, escribientes, y demás razas, siempre tan cómoda y recurrente, ¿verdad?. Los sindicatos tan condescendientes y bien correspondidos por el anterior gobierno, le organizan una huelga general a un gobierno que lleva "diez" minutos en el puesto y que aplica lo que a buen seguro hubiera aplicado el anterior de haber ganado las elecciones, dada la tutela latente y manifiesta de la UE. Lamento mi parte de culpa, pero asi lo siento. Dicho lo cual, convendré en aclarar que el que suscribe (como sabrá aquel que por aquí pase) hacia critica diaria de lo que creía conveniente al Gobierno ZP, como lo hago a diario de las cuestiones que me parecen oportunas al de Mariano Rajoy. Aclarada la cuestión por si se cuela algún menfotista, decir, que la razón parece evidente, uno no puede estar de acuerdo con que se haga responsable del desastre a quienes nada tienen que ver con ello, que no es otro que la ciudadania. Tanto los que están como los que hubierán estado, nos habrían hecho pasar por lo mismo que ahora vivimos, repito. Da el mismo resultado que te den un puñetazo con un puño, que con otro. Por consiguiente, no estando de acuerdo en absoluto con lo que está haciendo el gobierno actual, ni con sus manipulaciones en forma de malabarismos semanticos, tampoco lo estoy con la oposición, ni sindicatos, que andan metidos en una defensa que está más cerca del mantenimiento del establishment interno que de la representación real de los trabajadores (que por cierto convienen recordar que es de un 5%). Uno que es asi de raro. Podría citar casos de sindicalismo del dia a dia, hasta donde yo se, o conozco, pero lo dejare para otra ocasión, evitando con ello meter el dedo en llaga más de la cuenta. Tan solo recordaré que en mis 22 años de servicio conozco a individu@s liberad@s que no los he visto nunca en su puesto de trabajo. No digo más. No es que no crea en los sindicatos, más bien considero, que los cambios les deben afectar a ellos al igual que les afectan a los ciudadanos de a pie, habituándose a los tempos que a todos nos urgen a aplicar. Por consiguiente, contra este golpe de estado financiero como catalogo la situación actual alguien, no podemos estar de acuerdo, pero opino que las respuestas a estás políticas neoliberales deber seguir una senda en principio razonable y responsable, ya que tiempo habrá de radicalizar las mismas, cosa que lamento tener que admitir. Por todo ello, a diferencia de estos, prefiero ser combativo a diario, que hacerlo solo en huelgas generales. Mi trabajo es lo único que tengo, y siendo esto lo que se reclama para todos, un trabajo, no entiendo como se puede protestar sin ir al mismo, cuando estamos en una situación que dice, de ser un éxito la huelga, haría que se perderían casi 1.000 millones de euros en un país que está en los estertores de la muerte. Por cierto, el Diario francés "Le Monde", siempre tan cortes y atento con España, dice en su portada que España, se ha convertido en el gran problema de Europa. En lugar de huelga general, por que no movilizaciones diarias y constantes delante de cada centro oficial, singularmente por los liberados sindicales que tiempo tienen para ello, así como la organizacion de cualquier otro tipo de actos reivindicativos en diferentes puntos de la ciudad y centros de trabajo publico o privados, etc. etc.. ¿Tendrá razón mi amigo que desde Málaga y a través de su blog (http://fathergorgonzola.com) se lamenta hoy diciendo si tendremos lo que nos merecemos?, en este caso al referirse, de nuevo, a los juicios de valor y malditos estereotipos de tanto uso común en este país de linchadores que llamamos España. Para acabar me quedo con unas palabras referidas de igual modo en el mencionado blog de mi e-amigo Alvaro, y que cita un tal J. Rebuscá, el cual después de una honda reflexión grita a los cuatro vientos: "«Comentaristas, tertulianos, analistas sociales, críticos, editorialistas y parásitos de las ondas y la pluma, váyanse a tomar por culo». ¿Será verdad que la pluma es la lengua de la mente?,,,,,,Ja vorem.,
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