DESEMPOLVANDO

"El optimismo soluciona la mitad de cada problema".  (Jorge González Moore)

Levantarse temprano y cumplir con el ritual. Coger la bicicleta y salir dando un cadencioso movimiento de pedales que me lleva escapar un poco de no sabe uno bien que. Esto tiene unos efectos maravillosos no sólo físicamente, sino también mentalmente como todos sabemos. Aquí no importa si vamos a ser rescatados o no, si el Banco Central va a intervenir o todo lo contrario, nada importa más que disfrutar del momento. Circular por el paseo que discurre desde una esquina a otra de la Playa de San Juan a Muchavista es un espectáculo digno de contemplar a esas horas tan precoces. Parejas de señoras y señores mayores a un paso lento pero a la vez seguro, señor@s sesentones a los que el médico seguramente les ha dicho que hagan algo de ejercicio después de toda una vida sedentaria, y que ataviados con las mejores galas deportivas llevan un paso algo más ligero que los primeros. Grupos de cincuentones con sus iphones a los que parece que se les escape el último tren, corren o montan en bici a un ritmo sorprendente. También los de que pasando la barrera de los cuarenta creen que las próximas Olimpiadas pueden ser un objetivo alcanzable y que se les puede ver como escapando de la madurez en busca de la eterna juventud. Aquí como en el  Camino de Santiago  donde el peregrino o viajero tiene distintos objetivos y motivos en su discurrir, así asisten los distintos transeúntes de estás mañana estivales, buscando sus motivos y razones para seguir viviendo y "huyendo" cada uno de sus fantasmas personales, o lo que sea. Cada uno con "su penita donde le lleve el aire de levante y las olitas del mar", como dice Kiko Veneno en una de sus canciones. Demá mes. Ja vorem!