"No puedes obligarte a ti mismo a sentir algo que no sientes, pero si puedes obligarte a hacer el bien, a pesar de lo que sientes". (Pearl S. Buck)
Allá por el año 2005, en concreto el 12 de Junio, ese genio que fue Steve Jobs realizo un discurso en la prestigiosa y también carisma Universidad de Stanford , en concreto en su ceremonia de graduación. Ese discurso ha sido traído y llevado como un canto a la vida, a la superación y al incoformismo reflejados en la persona de este genio. A través de tres breves historia nos ofreció un curso digno de ser impartido a todo ser viviente en cualquiera de las ramas del saber por las que se mueva. Habría muchas cuestiones que destacar de esas palabras, pero quizás me quede en estos momentos con un párrafo del mismo, que bien podíamos colgar en la pared más venerada de nuestras casas, para ser leído y recordarlo a diario. Quizás de hacerlo, y sobre todo meditar en ello, muchos de los problemas que tenemos se reducirían en un porcentaje sorprendente. Ahí van sus palabras:
"Nadie quiere morir. Incluso la gente que quiere ir al cielo, no quiere morir para llegar
allá. La muerte es el destino que todos compartimos. Nadie ha escapado de ella. Y es como
debe ser porque la Muerte es muy probable que sea la mejor invención de la Vida. Es el
agente de cambio de la Vida. Elimina lo viejo para dejar paso a lo nuevo. Ahora mismo,
ustedes son lo nuevo, pero algún día, no muy lejano, gradualmente ustedes serán viejos y
serán eliminados. Lamento ser tan trágico, pero es muy cierto.
Su tiempo tiene límite, así que no lo pierdan viviendo la vida de otra persona. No se
dejen atrapar por dogmas – es decir, vivir con los resultados del pensamiento de otras
personas. No permitan que el ruido de las opiniones ajenas silencien su propia voz interior. Y
más importante todavía, tengan el valor de seguir su corazón e intuición, que de alguna
manera ya saben lo que realmente quieren llegar a ser. Todo lo demás es secundario."
¿Merece la pena añadir algo más?. Yo creo que no. Ser felices por favor!. Mañana más. Ja vorem